Realizada el 28/04/16
Laguna de l'Encanyissada desde el mirador de Patrau (Sant Carles de la Ràpita)
El recorrido de la ruta, de 22,5 km, es este
y el perfil de la misma
Puerto de Sant Carles de la Ràpita
La lluvia y el viento que nos esperaban en Sant Carles de la Ràpita no presagiaba nada bueno, pero tras un café calentito y con las bicicletas listas para empezar a pedalear, nos fuimos hacia el puerto que sería el punto de inicio saliendo del pueblo por la avda. dels Alfacs (TV-3408) hacia la playa dels Trabucadors, playa que se alarga (6,5 km) hasta la punta de la Banya, aunque dejaremos la carretera por el camí d'Horta Nova que aparecerá por nuestra izquierda.
Los caminos de tierra, húmedos, serán los protagonistas en esta primera parte de la etapa. Un giro a la derecha y uno posterior a la izquierda nos dejará en el lugar donde se unen el camí de la Rabosa y el de Sèquia del Mar, ambos señalizados con una placa que indica que forman parte de la red de rutas para bicicleta. En nuestro caso seguimos por el de la Rabosa hasta la primera bifurcación (camí de Nou); ya volveremos a él más adelante.
Durante el siguiente kilómetro y medio nos hacemos a la idea de cómo va a ser el paisaje predominante cuando rodemos por el interior del Delta: arrozales anegados (en esta época del año). Al igual que pasa en l'Albufera de Valencia se trata de un paisaje cambiante en función del momento en el que se encuentre el cultivo del arroz.
La única casa que veremos (casa Molinet) vale de referencia para abandonar el camí de Nou por la izquierda y reencontrarnos con el de Rabosa que, en este punto hace de linde con el área que encierra los Erms de Casablanca, desligados ahora del complejo lacustre de l'Encanyissada debido a los caminos, canales de riego y campos de cultivo.
Desagüe de Maquineta (Sant Carles de la Ràpita)
Tras torcer a la derecha se llega al final del camí de Rabosa, donde se encuentran las señales que marcan la ruta en bici. Seguiremos el desagüe de Maquineta (a nuestra derecha) pasando sobre él a unos 500 metros, acabando en una carretera asfaltada (seguimos por la izquierda) que discurre paralela al canal del Inglés. Casi 1 km después tenemos la posibilidad de hacer un giro de 180º, rodando ahora por un camino reacondicionado.
Hay que cruzar un puente sobre un canal y nos encontraremos en la orilla occidental de l'Encanyissada. A nuestra derecha (200 m) se distingue el mirador de Patrau donde, aun con estas condiciones meteorológicas, vale la pena acercarse.
L'Encanyissada (Sant Carles de la Ràpita)
Es la zona húmeda más grande del Delta, formada por las lagunas de l'Encanyissada, el Clot y la Nòria. Se comunica de modo natural con el Mediterráneo, en la bahía dels Alfancs, a través de la gola Vella, y en sus aguas faenan los pescadores de la cofradía de San Pedro.
L'Encanyissada (Sant Carles de la Ràpita)
Nos montamos en las bicis y volvemos hacia atrás, hacia la masía de les cases de Magí en el término municipal de Amposta. Cruzamos el desagüe de circunvalación y rodamos hacia el interior del Delta con la Sèquia Gran a nuestra izquierda. No muchos metros; enseguida aparece el camino por el que, sin dejarlo, iremos desde el extremo noroccidental hasta el nororiental (unos 7,5 km).
Para nuestra desgracia, lo que venía siendo una fina lluvia intermitente no sólo pasa a ser continua sino que, además, deja de ser fina y va ganando en intensidad... lo mismo que el viento. De modo que no nos detenemos hasta encontrar refugio bajo el mirador de l'Encanyissada, frente a la Casa de Fusta.
De todas formas iba a ser una parada obligatoria, ya que este edificio verde es el Centro de Información del Parque Natural del Delta del Ebro, cuya historia empieza en 1926, cuando tres barceloneses obtuvieron la licencia para levantar esta casa, con madera importada desde Canadá, para efectuar sus tiradas en la laguna.
Pasado 1966 ya fue el Estado el que se encargó de la gestión, terminando por convertir el edificio en un lugar destinado a facilitar un mejor conocimiento de esta zona natural.
Casa de Fusta -pedanía de Poblenou del Delta- (Amposta, Tarragona)
Reemprendemos la marcha en las mismas condiciones en que la interrumpimos y seguimos apuntando al Este de la laguna, encontrándonos otra vez con el desagüe en el punto donde empieza el camí del Traves.
Un obligado giro a la derecha en el cruce con la carretera de Poblenou del Delta, habiendo cruzado la Sèquia de l'Ala, marcará el límite occidental de l'Encanyissada y nos deja cerca de la siguiente laguna costera.
No llegamos a cubrir 700 metros por asfalto cuando hay que dejar la carretera (izquierda) y volver a la tierra... o barro, entre un ancho canal y la Sèquia de Manofles. Por suerte cuando alcanzamos la laguna de La Tancada, nos encontramos con un estrecho camino asfaltado que facilita bastante el avance.
La laguna de la Tancada es la segunda más grande del Delta. Unida en su momento a la de l'Encanyissada, fueron los aterramientos para ganar superficie destinada a arrozales lo que provocó que quedaran aisladas.
De nuevo recorremos toda la parte Norte, acercándonos poco a poco al mar, aunque hacemos una parada en uno de los miradores y, esta vez sí, no salimos hasta que deja de llover (y por suerte el viento aflojó también).
Allí decidimos que dábamos por terminada la ruta y no iríamos a la Punta de la Banya, así que cuando llegamos al cruce con la carretera de Baladares, giramos a la izquierda en lugar de a la derecha y fuimos directos al camping de la urbanización l'Eucaliptus.
Lo bueno es que por la tarde despejó así que, además de que pudimos secar la ropa y quitarle el barro a las bicis, las expectativas de poder recorrer la playa del Trabucador al día siguiente aumentaron y mucho.
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